En ISS, invertimos en crear una cultura de trabajo donde todos sientan que se escucha su voz y es valorada, sin importar su procedencia o educación. En colaboración con nuestros clientes, estamos encontrando maneras de ofrecer un lugar de trabajo más diverso e inclusivo.
Edwin van der Pol, Director de Innovación Social en ISS Países Bajos, comparte cómo el hecho de contemplar la diversidad y la inclusión como un servicio para el cliente incentiva la contratación con un enfoque de diversidad e inclusión que desemboca en el desarrollo y el respaldo constantes del empleado para que pueda emprender una carrera duradera y estimulante.
La inclusión como sinónimo de innovación La inclusión y la diversidad tratan de abarcar todos los aspectos, visibles y no visibles, que diferencian a las personas. Consideramos la inclusión y la diversidad en su sentido más amplio, abarcando desde la edad y el género hasta la orientación sexual y la capacidad física.
Desde sus oficinas centrales de ISS Países Bajos, Edwin y su equipo dirigen el lado operativo de nuestra oferta de diversidad e inclusión como servicio, una tarea que implica emprender proyectos y crear oportunidades para personas que, de otro modo, podrían tener dificultades para acceder al mercado laboral y permanecer en él.
“Es nuestra responsabilidad asegurarnos de que nuestra plantilla refleje la diversidad de nuestra sociedad”, comenta Edwin. “Reconocemos las fortalezas únicas de cada persona y tomamos la decisión de incorporarlas a nuestro estilo a la hora de hacer negocios”.
Los beneficios de una plantilla diversa e inclusiva son enormes y están ampliamente documentados. Nuestros propios estudios revelan que las empresas con un liderazgo diverso obtienen mejores resultados financieros, son más creativas y su eficacia al establecer relaciones comerciales sólidas es mayor.
“La combinación de conocimientos que genera la contratación de personas con diferentes orígenes puede ser enormemente beneficiosa para las empresas. Aporta alternativas en la forma de razonar y nuevas perspectivas que, con frecuencia, conducen a la innovación. En la práctica, no siempre es fácil, pero, sin duda, es positivo tanto para la sociedad como para nuestra organización”.
Reunir una plantilla compuesta por personas diversas ISS comenzó a ofrecer diversidad e inclusión como un Servicio en 2015. Según Edwin, la decisión de comenzar a ofrecer este servicio tuvo su origen en un acto de buena intención, la ley y los clientes.
“Nuestros clientes querían encontrar nuevas formas de ofrecer un lugar de trabajo más diverso e inclusivo. Cuando se aprobó una ley en los Países Bajos para ayudar a las personas desfavorecidas en la búsqueda de empleo, nos reunimos para crear un departamento que hiciera realidad ese objetivo”.
ISS invierte a nivel internacional en proyectos de innovación social en cooperación con mercados laborales regionales, gobiernos locales y nacionales, y otras entidades. Uno de esos proyectos en los Países Bajos es Top Academy, como parte del cual ISS colabora con empresas y escuelas de educación secundaria y especial en la impartición de capacitación profesional y práctica. A los participantes se les ofrecen oportunidades en una amplia variedad de sectores, desde el servicio de alimentos y el paisajismo hasta los negocios y el sector financiero, por mencionar algunos.
“Top Academy es un proyecto del que nos sentimos muy orgullosos”, reconoce Edwin. “Cada año, incorporamos al programa a unos 40 estudiantes sin calificación inicial y llevamos a cabo un plan de aprendizaje híbrido con nuestra base de clientes. Se trata de una iniciativa que ha añadido un valor significativo, no solo a los clientes de ISS, sino también a sus empleados y familias, con beneficios para toda la sociedad”.
Top Academy tiene un gran valor para todas las personas involucradas y es un claro ejemplo del poder de nuestras colaboraciones con clientes como PwC:
“Estoy orgullosa de nuestros avances en Top Academy”, comenta Marjolein Kurstjens, Directora de Gestión de la Demanda de Administración de Instalaciones en PwC Países Bajos. “Anualmente, recibimos un máximo de 12 alumnos procedentes de diferentes escuelas de educación práctica del área de Róterdam que trabajan a diario en la sucursal de la localidad”.
Los alumnos distribuyen su tiempo entre la escuela, la capacitación presencial y las clases prácticas en la sucursal con la ayuda de los instructores que acuden a PwC para enseñar. Tal equilibrio entre la instrucción académica y el aprendizaje guiado sobre el terreno ha demostrado ser eficaz para estos alumnos.
“Gracias a la mentoría intensiva, el coaching laboral y grandes dosis de autoestima, vemos florecer el talento y crecer la confianza de los chicos”, añade Marjolein. “Cuando completan con éxito la capacitación, obtienen un magnífico diploma. Pero lo más importante de todo es que adquieren una experiencia laboral específica y demostrable en una organización exigente y compleja. Eso representa un gran punto de partida para su carrera en el futuro. El año pasado, varios alumnos fueron promovidos al siguiente programa combinado de capacitación y trabajo, u obtuvieron un empleo dentro de ISS”.