Repartimos comidas a las oficinas domésticas
Cuando tuvimos que adaptarnos a las excepcionales circunstancias actuales, el restaurante fue capaz de reaccionar de inmediato y garantizar la provisión del servicio de restauración. En un primer momento, el habitual bufé se sustituyó por comidas previamente emplatadas y se tomaron más medidas en el servicio para evitar el contacto. Cuando casi el 90% de las personas que trabajaban en la oficina empezaron a teletrabajar, Osku Toivanen, de ISS y director del restaurante, desarrolló un servicio que ayudaba a los empleados de Outotec a pedir su comida a domicilio.
“Cada día repartimos unas 50 comidas a los domicilios de los empleados de Outotec”, explica Anssi.
“Nos sorprendió bastante lo bien que había ido la transición al teletrabajo para la mayoría de los empleados. Les hemos prestado sillas de oficina y monitores con la idea de que su entorno de trabajo doméstico fuera lo más ergonómico posible. La comida que les llevamos a casa también contribuyen a facilitarles la jornada”, comenta Erkko.
Capacidad de adaptación, un activo fundamental
Además de las innovadoras soluciones adoptadas en los servicios de restauración, la limpieza también se ha intensificado y, como corresponde a la situación, los servicios de recepción se gestionan con menos personal. Dado que el número de empleados presentes en las instalaciones es mucho menor que en condiciones normales, algunos espacios de la oficina se han cerrado.
“Hemos cerrado el 60% de los espacios de la oficina, una medida que ha reducido significativamente nuestro consumo energético”, afirma Erkko.
“Al disponer de más tiempo, hemos reorganizado nuestro trabajo. Ahora estamos llevando a cabo tareas que, en otras circunstancias, realizaríamos a finales del verano, como limpiar las ventanas. Aunque el recinto no se use tanto como antes, hay que seguir ocupándose de su mantenimiento y limpiando las instalaciones para que sean seguras”, explica Anssi.
Para Erkko, la oportunidad de ampliar los servicios en su conjunto para adaptarlos a las necesidades de transformación ha sido fundamental en esta situación sin precedentes. Una vez que se empiece a volver a la normalidad, ambas empresas tendrán que revisar lo acordado y decidir las necesidades. Anssi y Erkko también se plantean si el teletrabajo se incorporará definitivamente a la dinámica de trabajo de oficina a partir de ahora.
“El tiempo lo dirá. Nuestra maravillosa y fluida cooperación con ISS nos hace estar bien preparados ante cualquier cambio”, concluye Erkko.